Si utiliza fiambrera para llevar al trabajo, a la escuela, al instituto, a la universidad... es necesario que siga estos consejos de seguridad alimentaria:
- Utilice fiambreras limpias y aptas para uso alimentario. Si las utiliza para recalentar el alimento, compruebe también que son aptas para microondas (plástico o vidrio).
- Lavar cada día con agua caliente y jabón.
- Su destino, ya sea un centro de trabajo, un centro educativo... debe disponer de frigorífico y microondas exclusivo para las fiambreras, para garantizar la conservación y el calentamiento de los alimentos.
- En la preparación de la fiambrera, es importante seguir con cuidado las cuatro normas básicas para garantizar la seguridad de los alimentos: limpiar, separar, cocer y enfriar.
LIMPIAR:
- Lavarse las manos antes de empezar a preparar alimentos, después de manipular alimentos crudos y cada vez que sea necesario.
- Lave las verduras y hortalizas, con más cuidado si se comen crudas.
SEPARAR:
Evite el contacto de los alimentos crudos con los cocinados.
COCER:
- Cocer suficientemente los alimentos, sobre todo la carne y el pollo. Asegúrese de que los zumos de las carnes son claros y no rosados. Los zumos claros indican que la cocción es completa y que se ha alcanzado una temperatura suficiente para destruir a los microbios.
- Cuale bien el huevo de las tortillas, las quiches y los demás productos elaborados con huevo crudo. El huevo sin cuajar es un medio idóneo para que crezcan microbios. Evite salsas caseras a base de huevo crudo, como la mayonesa.
ENFRIAR:
- Cocine los alimentos con suficiente antelación para poder enfriarlos convenientemente. No mantenga las comidas a temperatura ambiente más de dos horas.
- Refrigera las comidas, lo antes posible, dentro de las fiambreras.
Evite las salsas caseras a base de huevo crudo y las elaboraciones de postres caseros a base de nata, huevo y cremas, por el riesgo de contaminación microbiana.
No rompa la cadena del frío. Retire las fiambreras de la nevera de casa en el último momento y colóquelas preferiblemente con un acumulador de frío, en una bolsa o una puerta fiambreras isoterma.
En cuanto llegue a su destino ( centro de trabajo, centro educativo...), guarde las fiambreras en el frigorífico. Es importante que no deje la bolsa con las fiambreras a temperatura ambiente.
En el último momento, cuando sea la hora de comer, se puede quitar la fiambrera de la nevera y calentarla en el microondas.
Es necesario rechazar los restos de alimentos que no se hayan comido en la basura (contenedor de restos orgánicos) del mismo comedor.