Las obras de reforma de la avenida de la Pineda, una de las intervenciones urbanísticas de mayor alcance de entre las que se han llevado a cabo durante el mandato 2015-2019, ya han finalizado. La reforma de la vía ha significado transformar esta vía en un nuevo eje cívico que une la playa y el centro de la ciudad, dando más protagonismo al peatón y el ciclista. Para los primeros, la avenida cuenta con nuevas aceras más amplias, además de mobiliario urbano como bancos, que invitan al paseo y la relación entre las personas.
Esculturas de Guinovart, una pérgola y una fuente con iluminación de colores
Un ejemplo destacado de esta transformación es el cruce entre la avenida y la rambla Marisol donde se unen los dos tramos del parque de la Corredera donde se han instalado • lat un conjunto escultórico de Josep Guinovart, una pérgola y una fuente que proyecta luces de colores.
Para la circulación en bicicleta, se ha trazado un carril bici de doble sentido, que más adelante empalmará con la playa gracias a una segunda fase de obras alrededor del puente sobre la autovía, y con el trazado para bicicletas del centro urbano que se desarrollará con el proyecto de transformación de la C-245, la avenida Constitución, que impulsa la AMB al conjunto de municipios vecinos.
Para conceder más espacio a peatones y ciclistas, el vehículo a motor deberá ceder parte de su actual protagonismo, por lo que en un tramo de la avenida del Pinar, entre la avenida Constitución y el paseo Pi Tort, hay un solo sentido de circulación (en dirección pueblo).