1. Introducción
La presencia de roedores está ligada desde hace siglos a la actividad del ser humano.
En las ciudades hay un grupo de ellos que pueden llegar a constituirse en plaga.
Aquí encuentran refugio tanto en edificaciones como en el alcantarillado, donde no solo obtienen protección de los depredadores, sino que disponen de grandes cantidades de agua y una interminable cantidad de alimentos que discurre por este.