El Ball de Pastorets está considerado un baile de bastones de palo largo con parlamentos. No se sabe a ciencia cierta como nació, hay quien cree que tiene un origen religioso y otros historiadores defienden que tiene un origen basado en antiguos rituales agrícolas y de fertilidad de la tierra.
Es un baile hablado donde los pastorcillos cuentan su vida en el campo. Está formado por siete pastorcillos, un rabadán (la persona más joven) y un mayoral, que dirige el baile. Aparte de la coreografía del baile, se destacan dos momentos: la bota, momento en el que une los palos formando una plataforma que eleva a uno de los pastorcillos, y los versos.

El vestuario del baile intenta reproducir el de los auténticos pastores. Llevan chaleco de lana, un sombrero de paja, perneras con cascabeles y una faja de la que cuelga una calabaza. Cada pastorcillo lleva un palo que hace picar a ritmo de la música en el suelo y bajo las piernas.
