A la hora de comprar
- Los alimentos no envasados deben estar fuera del alcance del público o protegidos por vitrinas, sobre todo aquellos que no se puedan lavar o cocer antes de consumirlos.
- Los alimentos congelados y refrigerados deben obtenerse directamente de las instalaciones frigoríficas, bien de las de almacenamiento o de las de exposición.
- Los alimentos que se consumen sin cocer (queso, jamón y charcutería en general) no deben tocarse con las manos.
- Las envolturas, así como las cajas y bolsas que estén en contacto con los alimentos, deben ser de materiales nuevos y limpios.
- Las latas de conserva no deben estar oxidadas ni hinchadas.
- Las setas deben ser tiernas, enteras y clasificadas por especies.
- La carne en canal (entera, cortada por la mitad o en cuartos), las piezas enteras de aves de corral y los conejos deben llevar la marca sanitaria que acredita la procedencia y el reconocimiento sanitario.
- La carne debe ser picada delante de usted, o bien envasada con la indicación de las fechas de elaboración y caducidad.
- Los mejillones, las almejas, las ostras, entre otros, deben llegar al punto de venta envasados e identificados para poder conocer su origen. Hay que rechazar a los que estén abiertos, ya que sólo están vivos cuando las valvas están cerradas.
- Los derivados lácteos (mantequilla, nata, yogures, batidos, cremas y queso rallado) deben adquirirse envasados, etiquetados y refrigerados.
- El aceite debe adquirirse envasado, etiquetado y precintado. No lo compre a granel.
- Compra los huevos bien limpios y sin ninguna grieta.
- Los alimentos envasados, incluso los denominados artesanos o típicos, deben ir etiquetados con los siguientes datos:
- Nombre del producto.
- Naturaleza del producto.
- Nombre y dirección del fabricante.
- Lista de todos los ingredientes.
- Volumen o peso.
- Fecha de duración máxima.
- Forma de conservación.
Mientras se llevan a casa
- Tenga la precaución de no mezclar los alimentos sin envasar.
- No junte los alimentos, por ejemplo los congelados y refrigerados con los que no lo son porque así se mantiene mejor el frío.
- No se entretenga después de la compra para que los alimentos lleguen a casa en las mejores condiciones posibles.
Al llegar a casa
- Guarde cada producto a la temperatura aconsejada.
- Guarde enseguida los alimentos congelados dentro del congelador.
- Guarde la carne fresca en el refrigerador y procure que el recipiente tenga una reja en el fondo para evitar que quede en contacto con el zumo que desprende.
- Si desea congelarla, envolverla con papel de aluminio o de plástico y colóquela en el congelador. Es conveniente que le marque la fecha.
- Tenga en cuenta las mismas normas cuando se trate de pescado, y siempre es necesario tenerlo bien aislado del resto de alimentos para que no se mezclen los olores.
- Guarde los huevos en el lugar que tienen reservado en el refrigerador.
- Limpie las hortalizas y elimine las partes no comestibles. Guardar en un lugar fresco o bien en los cajones del refrigerador destinados a este uso.
- Puede congelar algunos tipos de legumbres y hortalizas como los guisantes, las habas, las judías verdes, las espinacas, entre otras, que estén bien limpias y envasadas, y mejor si previamente han sido escaldadas.
- Guarde las frutas en un lugar fresco o en el señalado en el refrigerador.
- No mezcle los alimentos crudos con los alimentos cocinados dentro del refrigerador.
A la hora de preparar la comida
En primer lugar asegúrese de que el entorno, las vasijas y los utensilios de la cocina estén bien limpios, que no haya moscas ni insectos ni plantas ni animales domésticos.
- Lávese bien las manos antes de tocar los alimentos y vuelva a hacer las veces que sean necesarias, durante la preparación de la comida.
- Protéjase bien cualquier lesión que le afecte las manos con materiales impermeables.
- No tose ni estornude ante los alimentos, ya que esto puede ser causa de contaminaciones.
- Prepare las comidas con la mínima antelación posible antes de consumirlas. Cuando esto no sea posible, consérvelos refrigerados.
- Hervir muy bien la leche fresca y natural; después manténgala en el refrigerador.
- No coma los moluscos cocidos al vapor; hervir durante tres minutos.
- Cocer suficientemente los alimentos, sobre todo la carne, el pollo, los huevos y el pescado.
- Poner las verduras para ensaladas en remojo en agua potable y unas gotas de lejía durante cinco minutos; después, lávelas bien.
- Lavar bien las frutas antes de comerlas y, mejor, pelarlas.
- Utilice huevos limpios y sin ninguna grieta cuando haga mayonesa; añade zumo de limón o de vinagre para que sea ácida. Consérvela siempre en el refrigerador.
Para utilizar los alimentos congelados:
- Cocine directamente el marisco, las verduras y los platos preparados congelados.
- Calentar al baño maría los productos congelados con salsas o zumos.
- Evite descongelar los alimentos a temperatura ambiente. Para descongelar poco a poco la carne y el pescado, cámbialos del congelador en el refrigerador un día antes.
- Puede acelerar la descongelación de los alimentos siempre que estén dentro de envases herméticamente cerrados. Basta sumergirlos dentro de agua a temperatura ambiente sin abrir el envase.
- No vuelva a congelar un alimento previamente descongelado. Consúmelo lo antes posible.
Comida al aire libre
Cuando desee comer al aire libre, en el campo o en la playa, debe tener en cuenta que el tiempo transcurrido entre que se prepara la comida y se consume, sobre todo cuando hay temperaturas elevadas, puede favorecer el crecimiento microbiano y causar una intoxicación alimentaria.
- Es importante que mantenga la cadena del frío utilizando una nevera de picnic, lave bien los vegetales y las frutas antes de salir de casa y evite salsas que lleven huevo.